Represalias contra Inspectores por no desvelar datos de los exámenes durante la oposición de maestros

La última de Figar:

http://www.fetemadrid.es/feteInforma/P%C3%BAblica_2013-10-16_OposicionesMAestros.pdf

La Sección Sindical de UGT en la Inspección Educativa denuncia que los 
Inspectores Presidentes de las Comisiones de Coordinación de los Tribunales 
de la Oposición sufrieron presiones antes de sacar las notas de la prueba 
común por parte de la Administración para dar datos específicos de las 
respuestas concretas de la oposición de maestros 2013. 
Esta negativa ha supuesto que se castigue a varios Inspectores con la 
eliminación del Complemento de Productividad en su salario.
Los inspectores consideraron que sin haberse publicado las notas de la 
primera prueba, cualquier injerencia relacionada con la divulgación de datos 
fuera de la reserva de los tribunales y no sujetos a la convocatoria, se entendía 
totalmente improcedente, a la vez que podría vulnerar los derechos de los 
docentes como colectivo. 
Los Tribunales entregaron en su momento todos los datos que debían 
aportar a la Consejería, calificaciones…, por lo que no entendieron que se 
exigiera ese tipo de información cuya entrega no aparece recogida en la 
normativa del concurso-oposición, con lo que se podría considerar alegal. 
En estos días, esta vez por escrito, los Presidentes de las Tribunales han 
recibido una nueva solicitud para presentar nuevos datos y la Sección Sindical 
de UGT en la Inspección Educativa muestra su preocupación por la 
responsabilidad en la que podrían incurrir los Presidentes de los Tribunales que 
los aporten, sean Inspectores o no, porque no parece tratarse de un mero 
análisis estadístico sino de una posible transgresión de la reserva y soberanía 
de los tribunales. 
UGT considera que la Administración educativa de la Comunidad de 
Madrid actúa de forma despótica al presionar para la obtención de un 
anecdotario que en el pasado proceso selectivo fue utilizado de forma 
sensacionalista y que sirvió para la mofa y burla y el escarnio público de toda la 
profesión docente y causó un daño moral injustificado a los docentes y su 
consideración social.